Museo Picasso, España,
2000
El Museo existente ocupaba las fincas nº 15, 17 y 19 de la calle Montcada y es resultado de las sucesivas adecuaciones realizadas desde los años 80.
La ampliación y reforma realizada ahora se compone de la incorporación de una zona de la planta baja del nº 19, no disponible hasta el momento y de la totalidad de los edificios nº 21 (“Mauri”) y nº23 (“Finestres”) de la misma calle en dirección a Santa María del Mar.
La suma de los nº 21 y 23 se destina en sus tres plantas a Exposiciones Temporales y esto permitirá en un futuro reorganizar con comodidad en los nº 15, 17 y 19 los tres sectores clásicos de un Museo: Servicios Externos en Planta Baja, Exposición Permanente en Planta Primera y Servicios Internos en Planta Segunda. Una parcial Planta Tercera alojará las Instalaciones y Mantenimiento comunes a todo el conjunto. De esta forma la Planta Baja es de libre acceso en la totalidad de los cinco palacios.
Todo esto, tanto en lo que ahora se ha realizado como en lo que todavía falta por realizar, se apoya en el consolidado corredor lineal paralelo a la calle Montcada que actúa como eje vertebrador de todas las plantas en el conjunto de las cinco casas que a partir de ahora integran el Museo Picasso.
En la superficie que se incorpora en Planta Baja (nº 19) se instalan de manera más holgada la Sala de Conferencias y la Cafetería del Museo con un amplio contacto con el jardín. El traslado de la Cafetería libera, en el nº 17, el espacio necesario para poder trazar la vía de acceso al jardín posterior en una posición transversal respecto del eje longitudinal ya establecido y paralelo a la calle Montcada, reforzando así el carácter público de la planta baja con la existencia de los dos ejes perpendiculares de circulación que pretenden convertir en gesto urbanístico lo que podría ser una simple transformación interior.
El Museo aparecera con algunas fachadas Nuevas en el espacio público posterior compuesto por el jardín privado y la plaza colindante convirtiéndose el conjunto en una pieza de gran importancia para la renovación de la vida urbana del fragmento de ciudad que rodara el Museo. En la fachada de la calle Montcada las transformaciones producidas en las balconeras existentes, en concordancia con el uso museístico de los Espacios interiores, Quiero Matiz Ligeramente, de manera contemporánea, la tradicional composición de las fachadas conservadas.
El material utilizada en los paramentos verticales es la piedra natural histórica propia de Barcelona (Piedra de Montjuïc).
En los pavimentos y peldaños interiores se ha utilizado mármol blanco país (Macael).
El Museo con esta reforma y ampliación pasa de 7.144 m² a 11.196 m².
La ampliación y reforma realizada ahora se compone de la incorporación de una zona de la planta baja del nº 19, no disponible hasta el momento y de la totalidad de los edificios nº 21 (“Mauri”) y nº23 (“Finestres”) de la misma calle en dirección a Santa María del Mar.
La suma de los nº 21 y 23 se destina en sus tres plantas a Exposiciones Temporales y esto permitirá en un futuro reorganizar con comodidad en los nº 15, 17 y 19 los tres sectores clásicos de un Museo: Servicios Externos en Planta Baja, Exposición Permanente en Planta Primera y Servicios Internos en Planta Segunda. Una parcial Planta Tercera alojará las Instalaciones y Mantenimiento comunes a todo el conjunto. De esta forma la Planta Baja es de libre acceso en la totalidad de los cinco palacios.
Todo esto, tanto en lo que ahora se ha realizado como en lo que todavía falta por realizar, se apoya en el consolidado corredor lineal paralelo a la calle Montcada que actúa como eje vertebrador de todas las plantas en el conjunto de las cinco casas que a partir de ahora integran el Museo Picasso.
En la superficie que se incorpora en Planta Baja (nº 19) se instalan de manera más holgada la Sala de Conferencias y la Cafetería del Museo con un amplio contacto con el jardín. El traslado de la Cafetería libera, en el nº 17, el espacio necesario para poder trazar la vía de acceso al jardín posterior en una posición transversal respecto del eje longitudinal ya establecido y paralelo a la calle Montcada, reforzando así el carácter público de la planta baja con la existencia de los dos ejes perpendiculares de circulación que pretenden convertir en gesto urbanístico lo que podría ser una simple transformación interior.
El Museo aparecera con algunas fachadas Nuevas en el espacio público posterior compuesto por el jardín privado y la plaza colindante convirtiéndose el conjunto en una pieza de gran importancia para la renovación de la vida urbana del fragmento de ciudad que rodara el Museo. En la fachada de la calle Montcada las transformaciones producidas en las balconeras existentes, en concordancia con el uso museístico de los Espacios interiores, Quiero Matiz Ligeramente, de manera contemporánea, la tradicional composición de las fachadas conservadas.
El material utilizada en los paramentos verticales es la piedra natural histórica propia de Barcelona (Piedra de Montjuïc).
En los pavimentos y peldaños interiores se ha utilizado mármol blanco país (Macael).
El Museo con esta reforma y ampliación pasa de 7.144 m² a 11.196 m².
Premio
Prize Década 1999-2009 - Selected work
Prize Década 1999-2009 - Selected work
Ubicación
Carrer Montcada, 15-23
08003 Barcelona
Carrer Montcada, 15-23
08003 Barcelona
Promotor
Ajuntament de Barcelona
Ajuntament de Barcelona
Superficie
4052 m²
4052 m²
Año del proyecto
1982, 1986, 2000
1982, 1986, 2000
inicio de la construcción
2001
2001
Final de la construcción
2003
2003